Acerca de esta foto:

Anualmente, cada mes de noviembre desde hace más de cien años, se celebra la feria de camellos de Pushkar, en el estado indio de Rajastan. La esencia de la feria es básicamente la compra, venta y exposición de camellos y otros animales como por ejemplo caballos y toros. Pero además, durante estos mágicos días, la ciudad, los alrededores y principalmente el recinto ferial de Pushkar, se convierte en una especie de retiro cultural, un enorme y autentico carnaval lleno de intensos colores, donde pueden apreciarse las más puras escenas tradicionales y autóctonas del estado de Rajastan. Allí en medio de todo este desfile de color típico de la India, la encontré a ella una noche, sentada en la esquina de una calle, vendiendo productos sobre una manta. Me impacto verla, estaba tan relajada, serena y tranquila en medio de todo el ruido y el caos reinante, que me acerqué, y mediante gestos y señas le propuse hacerle una fotografía. Ella sin dejar de mirarme con sus increíbles ojos, accedió. Luego me aleje unos pocos pasos, le compre un helado como forma de agradecimiento y retribución por haberme permitido retratarla, pero cuando regrese, había desaparecido para siempre.